Pago digital: Las empresas europeas se están quedando rezagadas

Tan solo el 28% de las empresas europeas ofrece métodos de pago digitales, constata el estudio de EOS, sin embargo, en 2023 el 75% de la población usará métodos de pago digitales, según los pronósticos del proveedor de servicios de datos Statista. “Las empresas que no se adapten a este proceso, estarán poniendo en peligro su competitividad. Sobretodo las grandes empresas tradicionales deberían ofrecer este tipo de opciones de pago, especialmente soluciones de E-Wallet”, afirma Klaus Engberding, presidente de la junta directiva de EOS Group, “pero muchas empresas se están quedando rezagadas”.

En este sentido existen diferencias regionales. En Europa occidental un tercio de las empresas (32%) oferta pagos digitales, un aumento de seis puntos porcentuales en relación al año anterior. En los países del este de Europa solo lo hace una cuarta parte (26%), en comparación con el 30% del año anterior.

La oferta de pago con servicios E-Wallet es especialmente escasa. Tan solo un 6% de las empresas europeas ofrece esta función a clientes particulares, en el caso de clientes comerciales esta oferta se reduce al 3%. Las formas de pago más comunes son las transferencias online a través de proveedores externos, ofrecidas por un 20% de empresas a clientes particulares y por un 24% a clientes comerciales. Las funciones de pago con móvil han aumentado ligeramente, del 5 al 7%. También aquí existe una gran diferencia entre el este y el oeste. En los países de Europa occidental el porcentaje ha crecido del 6 al 10%, mientras que en Europa oriental permanece invariable en el 5%. Con solo el 1%, las criptomonedas apenas juegan un papel relevante.

“Las empresas deberían usar la implantación definitiva de la PSD2 para ampliar su oferta de pagos digitales”, afirma Engberding. “La implantación del nuevo reglamento les obliga a comprobar sus ofertas actuales”. Por ejemplo, ahora todos los proveedores de servicios de pago necesitarán una licencia emitida por la Autoridad Federal de Supervisión Financiera Alemana o la autoridad de supervisión correspondiente de otro país de la UE. A partir del 14 de septiembre también será obligatorio lo que se conoce como autenticación reforzada del cliente. Es decir, los clientes deberán confirmar dos elementos de seguridad en sus pagos online y con tarjeta, por ejemplo, una clave y un número de transacción, y este último solo podrá crearse digitalmente, las listas de números de transacción en papel ya no estarán permitidas. Las empresas que a partir del 14 de septiembre no ofrezcan pagos que cumplan la PSD2 corren el riesgo de recibir multas.

“El desconcierto de los clientes durante los próximos meses será inevitable. Los procesos de pago y aplicaciones de banca conocidos dejarán de funcionar como hasta ahora”, afirma Engberding. “La ciberseguridad no siempre es conveniente, pero no hay alternativa. Es absolutamente necesaria si queremos disfrutar de las innovaciones en el campo del comercio electrónico que la PSD2 hace posible”.